Para los nenes...

Hola chicos… ¿Cómo están? Yo estoy re contento, porque hoy voy a publicar la primera historia para ustedes, para que se diviertan, aprendan, jueguen al paddle y todo lo que ustedes quieran. Esta historia posee pocos subjetivemas (¿), deícticos de persona, lugar y vocativos.

Había una vez hace muuuucho muuuuucho tiempo, un señor gordo, muy gordo… lo vamos a llamar JMAguilar. Un día, con el carro a sus espaldas, estaba juntando cartón y papeles, pero de pronto se encontró con una lámpara (o también llamada Lampard)… no tuvo mejor idea que frotarla para ver si salía un genio para que le cumpla sus deseos; la froto una vez… nada, la froto dos veces… nada, la froto tres veces… nada; entonces comentó “esta lámpara de mierda… mejor la hago moneda”, inmediatamente cuando dijo “moneda” salio mucho humo de la lámpara… ¿un vende humo? ¿Un integrante de damas gratis fumando? ¿El canario petey? Nooooooo, era el genio… JMAguilar miro sorprendido a los ojos de ladino (así se hacia llamar el genio) y no dudo en hacerle algunas preguntas: “¿vos sos el genio? ¿Cuántos deseos tengo? ¿Es verdad que Pele debuto con un pibe?” Y muchas preguntas mas… a lo que el genio, harto de este muchacho, fue directamente al grano: “Decime los 3 deseos rápido que quiero fumar…” JMAguilar, anonadado, le contesto: “el primero me gustaría que sea… tener un club de fútbol. El segundo tener mucha plata. Y el tercero que esa plata sea producto del robo a hinchas, socios, jugadores, dirigentes, Badia, Bravo y Tete Coustarot…”. Sus deseos son ordenes, le respondió el genio trasladando al ex cartonero a una oficina de Figueroa (Lucho) Alcorta y Udaondo, creándole múltiples cuentas en bancos de Suiza, Tailandia, Haití, chile, entre otros países y entregándole un anotador, para que certifique a cuantas personas caga por minuto, hora, día, año, década… etc.
Ese mismo día, luego de asumir como presidente del Club de Fútbol, este entro en convocatoria de acreedores, acusando una deuda de 103 millones de pesos. El, como es un pija bárbaro, salio en los medios masivos de comunicación desmintiendo categóricamente esas acusaciones… pero todo eso fue en vano, porque a finales de noviembre Horacio Ameli, uno de los acreedores del club, no recibió su pago mensual y pidió ante la justicia la quiebre del club. Todos se lavaron las manos y dicha institución desapareció dejando a todos los empleados sin trabajo y sin poder alimentar a su familia. Tras este siniestro, JMAguilar se tomo un avión y se fue a vivir a Alaska para que los Barras del club no lo agarren y le arranquen todos los órganos vitales y no vitales uno por uno…
Bueno chicos, este ha sido el cuentito del día, espero que les haya gustado y servido para su futuro… les dejo un abrazo de gol y hasta la próxima.